Tipos de cierres más utilizados para envases cosméticos
El cierre para cualquier tipo de producto siempre es una parte importante pues es lo que hace que el contenido no se derrame ni se estropee, además de permitirnos una correcta administración del producto. Por eso los tipos de cierre en los envases cosméticos son tan importantes.
En envases cosméticos, normalmente, la mejor opción es el cierre hermético que impide que entre el aire en el producto y se contamine.
También es útil que contengan dosificador para no desaprovechar el contenido.
Algunos de los tipos de cierres más usados en cosmética son:
TAPAS FLIP FLOP:
Han ido siendo desplazadas por las tapas Disc top, aunque hay productos que, por necesidad, las siguen usando.
TAPAS DISC TOP:
Se caracterizan por su disco que, al ser presionado por un lado, se levanta por el otro para ser abierto y permitir dispensar el producto. Tienen mayor durabilidad y resistencia que las flip top pues son menos delicadas.
PIPETA O CUENTAGOTAS:
Un cuentagotas o gotero es un tubo hueco terminado en su parte inferior en forma cónica y cerrado por la parte superior por una perilla o dedal de goma.
Se utiliza para administrar pequeñas cantidades de líquido vertiéndolo gota a gota.
BOMBAS ATOMIZADORAS DE VÁLVULA:
Este tipo de cierre se utiliza para productos líquidos cuando se necesita producir una fina pulverización del producto.
PISTOLAS ATOMIZADORAS:
Tienen prácticamente el mismo uso y función que las bombas atomizadoras, solo cambia la estética del envase y la capacidad. Generalmente, para envases de mayor capacidad, se usa la pistola atomizadora ya que permite un manejo más fácil del envase y es más cómodo para pulverizar el producto.
BOMBAS DISPENSADORAS:
Son aptas para su uso en productos viscosos, tales como cremas, geles, jabones…
OPÉRCULOS O SELLOS:
Dentro de este existen varios tipos de cierre:
1/ Los sellos u opérculos sensitivos: Se aplican fácilmente, no es necesaria ninguna herramienta especial. La forma de poner este sistema de cierre es cerrando la tapa del envase a presión, quedando pegados a la boca de la botella.
2/ Los sellos u opérculos espumados: La función principal que tienen es la de dar un mejor sellado al envase. No sirven como sellos de seguridad como los sensitivos pues no cuentan con adhesivo, sólo se colocan en la parte interior de la tapa y se quedan en ese lugar.
3/ Los sellos u opérculos inductivos son aquellos que presentan un color aluminio por uno o ambos lados y cuentan con una película plá
stica que, con ayuda de una máquina de inducción, logra el sellado.